La celulitis infecciosa es generada por una bacteria que penetra en nuestra piel y puede derivar en diversos tipos y complicaciones.
Esta enfermedad de la piel es de tipo infeccioso y cuenta con la capacidad de expandirse con rapidez. Se conoce los siguientes tipos de celulitis infecciosa:
- Celulitis serosa: La zona afectada se torna dura, de color ojo, duele mucho y tiene una temperatura más elevada que el resto de la piel.
- Celulitis flegmonosa: La zona afectada se torna más blanda, no duele tanto y no afecta el estado general de salud de la persona.
- Celulitis purulenta: La herida supura, tiene un olor putrefacto, se torna de color amarillo y su consistencia es blanda.
- Celulitis periorbitaria: Suele aparecer por causa de una sinusitis paranasal, lastimaduras en la piel contaminadas con la bacteria "H. influenzae" o "S. pneumoniae". Afecta los párpados.
- Celulitis orbitaria: Al igual que el caso anterior se genera luego de una sinusitis, infecta el globo del ojo y su órbita, genera una atrofia en el movimiento del mismo, pérdida de la visión, fiebre y leucocitosis.